Familia, trabajo, compromiso y responsabilidad

Familia, trabajo, compromiso y responsabilidad

05/04/2021 - Una mirada personal, íntima, desde Agro de Souza, contando su propia historia.


El Licenciado Cecilio De Souza de la firma Agro de Souza S.A. mantuvo una amena charla con Hugo Dukart, en LU 36 AM 1440, recorriendo una línea de tiempo desde la actualidad hasta los inicios de esta empresa familiar. 

Consultado por la actualidad del negocio, la representación de la línea Case, y demás marcas esto decía: “hoy está complicado el panorama principalmente con lo que es la marca Case.  Hay varios problemas de abastecimiento, por eso no tenemos el stock que hubo en su momento. Se vendió todo en 2019 y 2020 y con las restricciones en las exportaciones es el faltante que tenemos. La fábrica de Córdoba trabaja a full como en las mejores épocas, pero hay faltante de determinados productos, por ejemplo cubiertas, hay unidades terminadas pero no se pueden entregar porque faltan cubiertas. Por eso no tenemos unidades en stock, lo que llega está uno o dos días en la concesionaria y ya sale a los campos a trabajar. 

El resto de la maquinaria que comercializamos, estamos con bastante actividad, es más dinámico el momento, vendemos sembradoras Crucianelli, los plazos de entrega son dilatados, pero se está trabajando muy bien, estamos entregando ahora lo que se vendió en 2020 y lo que se vende ahora se va a entregar en septiembre /octubre. Ha habido varios negocios, está bastante dinamizado todo con el crédito del Banco Nación que sacó del 23 % fijo a 4 años. Así que hay mucho movimiento en lo que es siembra. Con la línea Distrimaq también estamos muy bien con todo lo que es labranza, estas máquinas que sirven para labranza ligera de suelo, ellos son representantes de una firma Turca que se llama Ozdoken y se está vendiendo mucho. Rastras de discos, de la línea Mainero, forrajes estamos bien, la fábrica vendió muchísimo, como en las mejores épocas, arrolladoras no tenemos, hubo sobreventa. Todos los implementos se venden, hay movimiento. El precio de los cereales, oleaginosas, hacienda, están en buen valor. La gente no puede acceder al dólar entonces apunta a la inversión en maquinaria agrícola.  Siempre es necesario renovar maquinaria e implementos. Somos optimistas para este año, sobre todo si nos acompaña la palanca financiera, como el Banco Nación o el Banco Provincia”.

Respecto a la realidad de la fábrica Case ubicada en Córdoba, esto decía: “de otro país prácticamente no viene nada, vienen partes y se termina de armar acá en Argentina. El motor se fabrica acá, es el motor de la línea Fiat Iveco. Hoy en Córdoba se están produciendo tractores de 155 a 230 caballos, cosechadoras clase 5 a clase 8. Para fin de año está previsto que se produzca la línea Farmall que va de 80 a 110 caballos. Se está intensificando eso, en la segunda etapa se introduce la línea de mosquitos pulverizadores. Todo eso venía de Brasil, hoy no está entrando, y se produce acá, en Córdoba. Así que completamos toda la línea de productos Case fabricados aquí en Argentina”.

En cuanto al financiamiento de estos productos, esto decía:  “lo mismo que contaba hoy con implementos nacionales, al ser fabricación nacional les cabe el apalancamiento del Banco Nación, y a su vez tenemos la herramienta de CNH Capital que es el banco del grupo Case, siempre hay alguna herramienta para financiar y poder hacer negocios y acompañar al productor”. 

Aquí la historia de la empresa contada en primera persona por Cecilio de Souza y de cómo las experiencias personales se fueron amalgamando con la historia de la empresa familiar: 

“Agro de Souza S.A. comienza en 1973 o 1974, un emprendimiento familiar,  la empresa en sí es un desprendimiento de lo que era Casa Zilio, mi bisabuelo fue Juan Zilio. Mi papá y mi tío, trabajaron ahí durante muchos años, y luego se abren de Casa Zilio y forman junto con mi abuela, Agro de Souza hermanos y Cia. En el año 73/74. Arrancan con mucho coraje y alguna que otra representación. 

Mi tío estaba en ventas y mi papá en la parte administrativa. Las cosas se fueron dando, las representaciones de fábrica fueron llegando con el tiempo,  nosotros como familia siempre nos acompañamos, con trabajo, compromiso y responsabilidad. Siempre con la familia Rack en el taller, prestando servicio desde el vamos. El bastión más importante desde siempre fue el servicio y la post venta, y eso lo mantenemos. Yo en lo personal, estudié, trabajé afuera, en Buenos Aires, fui haciendo experiencia y siempre pensando en la idea de volver, Empecé como cadete en una consignataria de hacienda, luego hice algo de administrativo y algo de negocios, luego estuve en comercio exterior en una empresa alimenticia, mi negocio era traer productos de terceros y tratar de exportar, fue en la época de Menem, era muy difícil exportar. Hice una pasantía en Francia, me sirvió muchisimo esa experiencia, un día me pasé al banco de Boston, voy a dar un paso atrás pero voy a hacer una experiencia nueva, y trabajé como analista de crédito de riesgo agropecuario. Esa experiencia fue muy buena. Después de esto decido volver a Suárez, en simultáneo a eso me ofrecen entrar en Banco Río, pase a la parte comercial  como oficial agropecuario durante 4 años. Terminé como gerente de sucursal en General Roca, una experiencia sumamente enriquecedora, pero extremadamente extenuante, los que recuerdan el 2001 estábamos en la trinchera, nos teníamos que hacer cargo de algo que no había control, éramos la cara visible de la culpa, ni nosotros sabíamos que pasaba. Después de esto empieza el resurgimiento del país, y  ahí me termino metiendo en un retiro voluntario del banco y empiezo a hablar con mi papá y con mi tío y ahí nace Agro de Souza hacemos una escisión de la sociedad y ahí entro yo como socio, para continuar con la empresa.

Esa responsabilidad, la confianza y la tranquilidad de quien te la delega, hace que no sea una mochila pesada. Es una cuestión de tiempo, me costó 5 o 6 años, que me tengan confianza plena, cuando papá y el tío vieron que yo mantenía la esencia del negocio,  porque a veces una idea nueva puede ser disruptiva, eran tiempos de cambios. Con el tiempo eso fue fluyendo y hoy las conversaciones son de otra naturaleza. Hay mucha confianza en lo que hago. Es una mochila, porque es la empresa que ellos formaron, si bien ya pasaron 20 años desde que me incorporé, por suerte la empresa viene creciendo constantemente. Hoy somos 25 personas y si Dios quiere seguirá creciendo”.

Escuchá la entrevista: